Este libro interactivo y sonoro nos propone un viaje en el tiempo. El hilo conductor es el curso del río Miño, un río noble, sereno, melancólico, soberbio, internacional... A lo largo de los más de 300 km que recorre hasta su desembocadura, voces de ayer y de hoy se encuentran en el reflejo de sus aguas.

Un ciclo natural en constante circulación. Así es la vida de un río. Las enormes cuarcitas del Pedregal de Irimia custodian sus primeros latidos. El agua del manantial, la lluvia y los afluentes definen su trayectoria. Tres provincias gallegas por delante y una frontera internacional. Así es el Miño, en unas partes humilde y silencioso; en otras, salvaje y rugiente. Seguir leyendo

El Miño abraza el oeste de Lugo dejándose caer hacia el sur. Hacemos un alto en el camino para contemplar el paisaje desde lo alto de la muralla. Un puente romano cruza el río. A nuestros pies parece sentirse el murmullo de otro tiempo. Es el legado de la Hispania Romana. El borboteo constante de las aguas termales acentúa la sensación. Seguir leyendo

A su paso por la Ribeira Sacra, las luces y las sombras se hacen más intensas. El desnivel de las laderas nos descubre vistas de ensueño. La quietud, acompasada por el canto de los pájaros, convierte este lugar en un lugar sagrado donde el románico persiste y la modernización se rige por la orografía del paisaje. Seguir leyendo

El Sil llega tranquilo y solemne a morir en Os Peares. Un total de 234 km lo respaldan. Viene de tierras leonesas y antes de fundirse con el Miño ha surcado un cañón espectacular. En palabras de Unamuno parece ser la entrada al corazón de Galicia. Juntos, Miño y Sil, en adelante solo Miño, inician su nueva andadura hacia la ciudad de Ourense. Seguir leyendo

Los puentes que cruzan el Miño en la ciudad de Ourense dan cuenta del paso de los tiempos. Ponte Vella es el primero en recibir al viajero. Después vendrán Ponte Nova y dos más hasta llegar, en los albores del siglo XXI, al Puente del Milenio. Sin embargo, la niebla de la mañana parece eterna. Seguir leyendo

Siguiendo el curso del río nos adentramos en la comarca de Ribeiro. La belleza se extiende por igual en ambas orillas. Nos detenemos en Ribadavia, capital de la comarca que nos introduce, como en un cuento, en los peldaños de la historia. Ciudad de cruce de culturas y antesala de una tierra de vides, termas y paz. Seguir leyendo

El testimonio de los habitantes de ambas orillas nos permite adentrarnos en sus recuerdos. Las fotografías que llevan consigo duermen en cajones o en alguna estancia de sus hogares. Son memorias de tiempos de pesca, de tradición y romería. Memorias tejidas en colectividad. Seguir leyendo

Una vista panorámica desde lo alto del Monte Santa Tegra ilustra el final de nuestro relato. Ha transcurrido un siglo desde que se tomó la imagen. El río avanza por el estuario para encontrar descanso en el Atlántico. A lo lejos se vislumbra una playa abierta al mar. Seguir leyendo